Otro sueño

Soñé que tenía más de un brazo para tomarte. Y quise ser más ágil que un pájaro para poder encontrarte. Pero los pájaros aquí no vuelan, ni los gatos siquiera maúllan. Es todo así, por siempre y para siempre. No se sueña ni se desea: simplemente no se puede. No trates de romper tus ataduras. No tienes más brazos ni tampoco más labios con los que hablar. Quédate en eso, pájaro, vuela sin alas. Y maúlla sin ser gato. Es mejor que vivir por siempre con tus pies pudriéndose. Es mejor que vivir por siempre con tus dedos retorciéndose. Así es de simple. No puedes desprenderte. Soñé que tenía otro dedo para hurgarlo en ti. Soñé que volvía a tener tacto para volcarlo en tu piel. Soñé que lo podía hacer contigo. Soñé que podía ser feliz. Pero sólo soñé... soñé... soñé....